La única magia que la alineación de los Yankees ha conjurado últimamente es hacer que los lanzadores abridores opuestos parezcan imbatibles.
El zurdo de los Angelinos, Patrick Sandoval, es el mejor del grupo que los Yankees han enfrentado en este viaje por carretera, que fue una receta para el desastre para el club de Aaron Boone.
Los Yankees difícilmente pudieron tocar a Sandoval, o al bullpen de los Angelinos, logrando solo dos hits toda la noche en otro mísero esfuerzo ofensivo que se convirtió en una derrota por 5-1 el martes en el Angel Stadium.
Después de sufrir derrotas consecutivas en entradas extra, los Yankees (50-46) se ahorraron el golpe en el estómago el martes y fueron dominados durante nueve entradas en el camino a su octava derrota en sus últimos 10 juegos.
Sandoval navegó a través de 7 ¹/₃ entradas con siete ponches, permitiendo solo un jonrón solitario de Gleyber Torres en la tercera entrada y un sencillo de Anthony Volpe en la octava.
También dio tres bases por bolas, todas ellas en las dos primeras entradas, pero los Yankees no pudieron aprovechar.
