El abridor de los Mets Max Scherzer podría estar fuera de acción entre seis y ocho semanas debido a un tirón del músculo oblicuo en el costado izquierdo, otro golpe a una rotación de Nueva York que ya echaba de menos al as Jacob deGrom.
Scherzer, tres veces ganador del premio Cy Young, se sometió a una resonancia magnética el jueves, un día después de que pidió que le sacaran en medio de una apertura contra los Cardenales de San Luis. Lanzaba en cuenta de 1-1 ante el dominicano Albert Pujols en el sexto inning, y dijo que sintió un «halón» en el costado izquierdo.
Los Mets informaron que la resonancia detectó un tirón cuya gravedad oscila entre moderada y grave. La lesión del oblicuo suele causar dolor en el costillar.
Pese a las lesiones, los Mets lideran la División Este de la Liga Nacional con siete juegos de ventaja, su mayor margen de la temporada.
«Ésta es una gran oportunidad para los chicos a quienes pensábamos traer acá», dijo el manager Buck Showalter, después de un triunfo con remontada, 7-6 sobre San Luis. «Tenemos a algunos chicos que se reunirán con nosotros en Denver y tratarán de responder. Tenemos algunos pronósticos malos sobre cuándo comenzaremos a recuperar a alguna de esta gente».
